jueves, 21 de abril de 2011

Complejidad, ciudadania y poder: Los cambios de la transmodernidad

El 22 de marzo pasado se llevo acabo el Foro Internacional Politics en argentina, uno de los temas principales fue la complejidad y sistemas complejos aplicados a las ciencias sociales, en particular, a la política y la ciudadanía. Andrés Schuschny, experto en ciencias de la complejidad y transdisciplinariedad, desarrolló como orador una exposición llamada "Complejidad, ciudadanía y poder: los caminos de la transmodernidad".

Exposición:


Presentación:

martes, 19 de abril de 2011

Las tres capas del marketing en redes sociales

Comparto con ustedes el vídeo completo de la conferencia en el Conversion Thursday Madrid de Diciembre en el que Sergio Maldonado y presentábamos la idea de las tres capas en marketing en redes sociales y lo complementamos con ideas para campañas en Facebook.

domingo, 17 de abril de 2011

Discursos de Fidel Castro (1953)


El 16 de octubre de 1953, el entonces dirigente del grupo cubano clandestino Movimiento, Fidel Castro, pronunció su personal alegato ante el tribunal que le juzgaba por su participación tres meses antes en el asalto al cuartel de Moncada.

Cuba podría albergar espléndidamente una población tres veces mayor; no hay razón, pues, para que exista miseria entre sus actuales habitantes. Los mercados debieran estar abarrotados de productos; las despensas de las casas debieran estar llenas; todos los brazos podrían estar produciendo laboriosamente. No, eso no es inconcebible. Lo inconcebible es que haya hombres que se acuesten con hambre mientras quede una pulgada de tierra sin sembrar; lo inconcebible es que haya niños que mueran sin asistencia médica, lo inconcebible es que el treinta por ciento de nuestros campesinos no sepan firmar, y el noventa y nueve por ciento no sepa de historia de Cuba; lo inconcebible es que la mayoría de las familias de nuestros campos estén viviendo en peores condiciones que los indios que encontró Colón al descubrir la tierra más hermosa que ojos humanos vieron.

Lo inconcebible es que la mayoría de las familias de nuestros campos estén viviendo en peores condiciones que los indios que encontró Colón al descubrir la tierra más hermosa que ojos humanos vieron.

A los que me llaman por esto soñador, les digo como Martí: "El verdadero hombre no mira de qué lado se vive mejor, sino de qué lado está el deber; y ése es [...] el único hombre práctico cuyo sueño de hoy será la ley de mañana, porque el que haya puesto los ojos en las entrañas universales y visto hervir los pueblos, llameantes y ensangrentados, en la artesa de los siglos, sabe que el porvenir, sin una sola excepción, está del lado del deber."

Únicamente inspirados en tan elevados propósitos, es posible concebir el heroísmo de los que cayeron en Santiago de Cuba. Los escasos medios materiales con que hubimos de contar, impidieron el éxito seguro. A los soldados les dijeron que Prío nos había dado un millón de pesos; querían desvirtuar el hecho más grave para ellos: que nuestro movimiento no tenía relación alguna con el pasado, que era una nueva generación cubana con sus propias ideas, la que se erguía contra la tiranía, de jóvenes que no tenían apenas siete años cuando Batista comenzó a cometer sus primeros crímenes en el año 34. La mentira del millón no podía ser más absurda: si con menos de veinte mil pesos armamos cientos sesenta y cinco hombres y atacamos un regimiento y un escuadrón, con un millón de pesos hubiéramos podido armar ocho mil hombres, atacar cincuenta regimientos, cincuenta escuadrones, y Ugalde Carrillo no se habría enterado hasta el domingo 26 de julio a las 5_15 de la mañana. Sépase que por cada uno que vino a combatir, se quedaron veinte perfectamente entrenados que no vinieron porque no había armas. Esos hombres desfilaron por las calles de La Habana con la manifestación estudiantil en el Centenario de Martí y llenaban seis cuadras en masa compacta. Doscientos más que hubieran podido venir o veinte granadas de mano en nuestro poder, y tal vez le habríamos ahorrado a este honorable tribunal tantas molestias.

Los políticos se gastan en sus campañas millones de pesos sobornando conciencias, y un puñado de cubanos que quisieron salvar el honor de la patria tuvo que venir a afrontar la muerte con las manos vacías por falta de recursos. Eso explica que al país lo hayan gobernado hasta ahora, no hombres generosos y abnegados, sino el bajo mundo de la politiquería, el hampa de nuestra vida pública.

Con mayor orgullo que nunca digo que consecuentes con nuestros principios, ningún político de ayer nos vi tocar a sus puertas pidiendo un centavo, que nuestros medios se reunieron con ejemplos de sacrificios que no tienen paralelo, como el de aquel joven, Elpidio Sosa, que vendió su empleo y se me presentó un día con trescientos pesos "para la causa"; Fernando Chenard, que vendió sus aparatos de su estudio fotográfico, con el que se ganaba la vida; Pedro Marrero, que empeñó su sueldo de muchos meses y fue preciso prohibirle que vendería también los muebles de su casa; Oscar Alcalde, que vendió su laboratorio de productos farmacéuticos; Jesús Montané, que entregó el dinero que había ahorrado durante más de cinco años; y así por el estilo muchos más, despojándose cada cual de lo poco que tenía.

Hace falta tener una fe muy grande en su patria para proceder así, y estos recuerdos de idealismo me llevaron directamente al más amargo capítulo de esta defensa: el precio que les hizo pagar la tiranía por querer librar a Cuba de la opresión y la injusticia.

¡Cadáveres amados los que un día Ensueños fuisteis de la patria mía, Arrojad, arrojad pobre mi frente Polvo de vuestros huesos carcomidos! ¡Tocad mi corazón con vuestras manos! ¡Gemid a mis oídos!¡Cada uno ha de ser de mis gemidos Lágrimas de uno más de los tiranos!¡Andad a mi rencor; vagad en tanto Que mi ser vuestro espíritu recibe.

¡Y dadme de las tumbas el espanto, que es poco ya para llorar el llanto cuando en infame esclavitud se vive!

Multiplicad por diez el crimen del 27 de noviembre de 1871 y tendréis los crímenes monstruosos y repugnantes del 26, 27, 28 y 29 de julio de 1953 en Oriente. Los hechos están recientes todavía, pero cuando los años pasen y el cielo de la patria se despeje, cuando los ánimos exaltados se aquieten y el miedo no turbe los espíritus, se empezará a ver en toda su espantosa realidad la magnitud de la masacre, y las generaciones venideras volverán aterrorizadas los ojos hacia este acto de barbarie sin precedentes en nuestra historia. Pero no quiero que la ira me ciegue, porque necesito toda la claridad de mi mente y la serenidad del corazón destrozado para exponer los hechos tal como ocurrieron, con toda sencillez, antes que exagerar el dramatismo, porque siento vergüenza, como cubano, que unos hombres sin entrañas, con sus crímenes incalificables, hayan deshonrado nuestra patria ante el mundo.

No fue nunca el tirano Batista un hombre de escrúpulos que vacilara antes de decir al pueblo la más fantástica mentira. Cuando quiso justificar el traidor cuartelazo del 10 de marzo, inventó un supuesto golpe militar que habría de ocurrir en el mes de abril y que "él quiso evitar para que no fuera sumida en sangre la república", historieta ridícula que no creyó nadie; y cuando quiso sumir en sangre la república y ahogar en el terror, la tortura y el crimen la justa rebeldía de una juventud que no quiso ser esclava suya, inventó entonces mentiras más fantásticas todavía. ¡Qué poco respeto se le tiene a un pueblo, cuando se le trata de engañar tan miserablemente! El mismo día que fui detenido, yo asumí públicamente la responsabilidad del movimiento armado del 26 de julio, y si una sola de las cosas que dijo el dictador contra nuestros combatientes en su discurso del 27 de julio hubiese sido cierta, bastaría para haberme quitado la fuerza moral en el proceso. Sin embargo, ¿por qué no se me llevó al juicio? ¿Por qué falsificaron certificados médicos? ¿Por qué se violaron todas las leyes del procedimiento y se descartaron escandalosamente todas las órdenes del tribunal? ¿Por qué se hicieron cosas nunca vistas en ningún proceso público a fin de evitar a toda costa mi comparecencia? Yo en cambio hice lo indecible por estar presente, reclamando del tribunal que se me llevase al juicio en cumplimiento estricto de las leyes, denunciando las maniobras estricto de las leyes, denunciando para impedirlo; quería discutir con ellos frente a frente y cara a cara. Ellos no quisieron: ¿Quién temía la verdad y quién no la temía?

Las cosas que afirmó el dictador desde el polígono del campamento de Columbia, serían dignas de risa si no estuviesen tan empapadas de sangre. Dijo que los atacantes eran un grupo de mercenarios entre los cuales había numerosos extranjeros; dijo que la parte principal del plan era un atentado contra él —él, siempre él—, como si los hombres que atacaron el baluarte del Moncada no hubieran podido matarlo a él y a veinte como él, de haber estado conformes con semejantes métodos; dijo que el ataque había sido fraguado por el ex presidente Prío y con dinero suyo, y se ha comprobado ya hasta la saciedad la ausencia absoluta de toda relación entre este movimiento y el régimen pasado; dijo que estábamos armados de ametralladoras y granadas de mano, y aquí los técnicos del Ejército han declarado que sólo teníamos una ametralladora degollado a la posta, y ahí han aparecido en el sumario los certificados de defunción y los certificados médicos correspondientes a todos los soldados muertos o heridos, de donde resulta que ninguno presentaba lesiones de arma blanca. Pero sobre todo, lo más importante, dijo que habíamos acuchillado a los enfermos del Hospital Militar, y los médicos de ese mismo hospital, ¡nada menos que los médicos del Ejército!, han declarado en el juicio que ese edificio nunca estuvo ocupado por nosotros, que ningún enfermo fue muerto o herido y que sólo hubo allí una baja, correspondiente a un empleado sanitario que se asomó imprudentemente por una ventana.

Cuando un jefe de Estado o quien pretende serlo hace declaraciones al país, no habla por hablar: alberga siempre algún propósito, persigue siempre un efecto, lo anima siempre una intención. Si ya nosotros habíamos sido militarmente vencidos, si ya no significábamos un peligro real para la dictadura, ¿por qué se nos calumniaba de ese modo? Si no está claro que era un discurso sangriento, si no es evidente que se pretendía justificar los crímenes que se estaban cometiendo desde la noche anterior y que se irían a cometer después, que hablen por mí los números: el 27 de julio, en su discurso desde el polígono militar, Batista dijo que los atacantes habíamos tenido treinta y dos muertos; al finalizar la semana los muertos ascendían a más de ochenta. ¿En qué batallas, en qué lugares, en qué combates murieron esos jóvenes? Antes de hablar Batista se habían asesinado más de veinticinco prisioneros; después que habló Batista se asesinaron cincuenta.

¡Qué sentido del honor tan grande el de esos militares modestos, técnicos y profesionales del Ejército, que al comparecer ante el tribunal no desfiguraron los hechos y emitieron sus informes ajustándose a la estricta verdad! ¡Ésos sí son militares que honran el uniforme, ésos sí son hombres! Ni el militar verdadero ni el verdadero hombre es capaz fe manchar su vida con la mentira o el crimen. Yo sé que están terriblemente indignados con los bárbaros asesinatos que se cometieron, yo sé que sienten con repugnancia y vergüenza el olor a sangre homicida que impregna hasta la última piedra del cuartel Moncada.

Emplazo al dictador a que repita ahora, si puede, sus ruines calumnias por encima del testimonio de esos honorables militares, lo emplazo a que justifique ante el pueblo de Cuba su discurso del 27 de julio, ¡que no se calle, que hable!, que digan quiénes son los asesinos, los despiadados, los inhumanos, que diga si la Cruz de Honor que fue a ponerles en el pecho a los héroes de la masacre era para premiar los crímenes repugnantes que se cometieron; que asuma desde ahora la responsabilidad ante la historia y no pretenda decir después que fueron los soldados sin órdenes suyas, que explique a la nación los setenta asesinatos; ¡fue mucha la sangre! La nación necesita una explicación, la nación lo demanda, la nación lo exige.

Se sabía que en 1933, al finalizar el combate del hotel Nacional, algunos oficiales fueron asesinados después de rendirse, lo cual motivó una enérgica protesta de la revista Bohemia ; se sabía también que después de capitulado el fuerte de Atarés las ametralladoras de los sitiadores barrieron una fila de prisioneros y que un soldado, preguntando quién era Blas Hernández, lo asesinó disparándole un tiro en pleno rostro, soldado que en premio de su cobarde acción fue ascendido a oficial. Era conocido que el asesinato de prisioneros está fatalmente unido en la historia de Cuba al nombre de Batista. ¡Torpe ingenuidad nuestra que no lo comprendimos claramente! Sin embargo, en aquellas ocasiones los hechos ocurrieron en cuestión de minutos, no más que lo de una ráfaga de ametralladoras cuando los ánimos estaban todavía exaltados, aunque nunca tendrá justificación semejante proceder.

No fue así en Santiago de Cuba. Aquí todas las formas de crueldad, ensañamiento y barbarie fueron sobrepasadas. No se mató durante un minuto, una hora o un día entero, sino que en una semana completa, los golpes, las torturas, los lanzamientos de azotea y los disparos no cesaron un instante como instrumentos de exterminio manejados por artesanos perfectos del crimen. El cuartel Moncada se convirtió en un taller de tortura y de muerte, y unos hombres indignos convirtieron el uniforme militar en delantales de carniceros. Los muros se salpicaron de sangre; en las paredes las balas quedaron incrustadas con fragmentos de piel, sesos y cabellos humanos, chamusqueados por los disparos a boca de jarro, y el césped se cubrió de oscura y pegajosa sangre. Las manos criminales que rigen los destinos de Cuba habían escrito para los prisioneros a la entrada de aquel antro de muerte, la inscripción del infierno: "Dejad toda esperanza."

No cubrieron ni siquiera las apariencias, no se preocuparon lo más mínimo por disimular lo que estaban haciendo: creían haber engañado al pueblo con sus mentiras y ellos mismos terminaron engañándose. Se sintieron amos y señores del universo, dueños absolutos de la vida y la muerte humana. Así, el susto de la madrugada lo disiparon en un festín de cadáveres, en una verdadera borrachera de sangre.

Las crónicas de nuestra historia, que arrancan cuatro siglos y medio atrás, nos cuentan muchos hechos de crueldad, desde las matanzas de indios indefensos, las atrocidades de los piratas que asolaban las costas, las barbaridades de los guerrilleros en la lucha de la independencia, los fusilamientos de prisioneros cubanos por el ejército de Weyler, los horrores del machadato, hasta los crímenes de marzo del 35; pero con ninguno se escribió una página sangrienta tan triste y sombría, por el número de víctimas y por la crueldad de sus victimarios, como en Santiago de Cuba. Sólo un hombre en todos esos siglos ha manchado de sangre dos épocas distintas de nuestra existencia histórica y ha clavado sus garras en la carne de dos generaciones de cubanos. Y para derramar este río de sangre sin precedentes esperó que estuviésemos en el Centenario del Apóstol y acabada de cumplir cincuenta años la república que tantas vidas costó para la libertad, porque pesa sobre un hombre que había gobernado ya como amo durante once largos años este pueblo que por tradición y sentimiento ama la libertad y repudie el crimen con toda su alma, un hombre que no ha sido, además, ni leal, ni sincero, ni honrado, ni caballero un solo minuto de su vida pública.

No fue suficiente la traición de enero de 1934, los crímenes de marzo de 1935, y los cuarenta millones de fortuna que coronaron la primera etapa; era necesaria la traición de marzo de 1952, los crímenes de julio de 1953 y los millones que sólo el tiempo dirá. Dante dividió su infierno en nueve círculos: puso en el séptimo a los criminales, puso en el octavo a los ladrones y puso en el noveno a los traidores. ¡Duro dilema el que tendrían los demonios para buscar un sitio adecuado al alma de este hombre... si este hombre tuviera alma! Quien alentó los hechos atroces de Santiago de Cuba, no tiene entrañas siquiera.

Conozco muchos detalles de la forma en que se realizaron esos crímenes por boca de algunos militares que, llenos de vergüenza, me refirieron las escenas de que habían sido testigos.

Terminado el combate se lanzaron como fieras enfurecidas sobre la ciudad de Santiago de Cuba y contra la población indefensa saciaron las primeras iras. En plena calle y muy lejos del lugar donde fue la lucha le atravesaron el pecho de un balazo a un niño inocente que jugaba junto a la puerta de su casa, y cuando el padre se acercó para recogerlo, le atravesaron la frente con oro balazo. Al "Niño" Cala, que iba para su casa con un cartucho de pan en las manos, lo balacearon sin mediar palabra. Sería interminable referir los crímenes y atropellos que se cometieron contra la población civil. Y si de esta forma actuaron con los que no habían participado en la acción, ya puede suponerse la horrible suerte que corrieron los prisioneros participantes o que ellos creían que habían participado: porque así como en esta causa involucraron a muchas personas ajenas por completo a los hechos, así también mataron a muchos de los prisioneros detenidos que no tenían nada que ver con el ataque; éstos no están incluidos en las cifras de víctimas que han dado, las cuales se refieren exclusivamente a los hombres nuestros. Algún día se sabrá el número total de inmolados.

El primer prisionero asesinado fue nuestro médico, el doctor Mario Muñoz, que no llevaba armas ni uniforme y vestía su bata de galeno, un hombre generoso y competente que hubiera atendido con la misma devoción tanto al adversario como al amigo herido. En el camino del Hospital Civil al cuartel le dieron un tiro por la espalda y allí lo dejaron tendido boca abajo en un charco de sangre. Pero la matanza en masa de prisioneros no comenzó hasta pasadas las 3:00 de la tarde. Hasta esa hora esperaron órdenes. Llegó entonces de La Habana el general Martín Díaz Tamayo, quien trajo instrucciones concretas salidas de una reunión donde se encontraban Batista, el jefe del Ejército, el jefe del SIM, el propio Díaz Tamayo y oros. Dijo que "era una vergüenza y un deshonor para el Ejército haber tenido en el combate tres veces más bajas que los atacantes y que había que matar diez prisioneros por cada soldado muerto". ¡Ésta fue la orden!.

En todo grupo humano hay hombres que bajos instintos, criminales natos, bestias portadoras de todos los atavismos ancestrales revestidas de forma humana, monstruos refrenados por la disciplina y el hábito social, pero que si se les da a beber sangre en un río no cesarán hasta que los haya secado. Lo que estos hombres necesitan precisamente era esa orden. En sus manos precio lo mejor de Cuba: lo más valiente, lo más honrado, lo más idealista. El tirano los llamó mercenarios, y allí estaban ellos muriendo como héroes en manos de hombres que cobran un sueldo de la República y que con las armas que ella les entregó para que la defendieran sirven los intereses de una pandilla y asesinan a los mejores ciudadanos.

En medio de las torturas les ofrecían la vida si traicionando su posición ideológica se prestaban a declarar falsamente que Prío les había dado el dinero, y como ellos rechazaban indignados la proposición, continuaban torturándolos horriblemente. Les trituraron los testículos y les arrancaron los ojos, pero ninguno claudicó, ni se oyó un lamento ni una súplica: aun cuando los habían privado de sus órganos viriles, seguían siendo mil veces más hombres que todos sus verdugos juntos. Las fotografías no mientan y esos cadáveres aparecen destrozados. Ensayaron otros medios; no podían con el valor de los hombres y probaron el valor de las mujeres. Con un ojo humano ensangrentado en las manos se presentaron un sargento y varios hombres en el calabozo donde se encontraban las compañeras Melba Hernández y Haydée Santamaría, y dirigiéndose a la última mostrándole el ojo, le dijeron: "Este es de tu hermano, si tú no dices lo que no quiso decir, le arrancaremos el otro." Ella, que quería a su valiente hermano por encima de todas las cosas, les contestó llena de dignidad: "Si ustedes le arrancaron un ojo y él no lo dijo, mucho menos lo diré yo." Más tarde volvieron y las quemaron en los brazos con colillas encendidas, hasta que por último, llenos de despecho, le dijeron nuevamente a la joven Haydée Santamaría: "Ya no tienes novio porque te lo hemos matado también." Y ella les contestó imperturbable otra vez: "Él no está muerto, porque morir por la patria es vivir." Nunca fue puesto en un lugar tan alto de heroísmo y dignidad el nombre de la mujer cubana.

No respetaron ni siquiera a los heridos en el combate que estaban recluidos en distintos hospitales de la ciudad, adonde los fueron a buscar como buitres que siguen la presa. En el Centro Gallego penetraron hasta el salón de operaciones en el instante mismo que recibían transfusión de sangre dos heridos graves; los arrancaron de las mesas y como no podían estar en pie, los llevaron arrastrando hasta la planta baja donde llegaron cadáveres.

No pudieron hacer lo mismo en la Colonia Española, donde estaban recluidos los compañeros Gustavo Arcos y José Ponce, porque se los impidió valientemente el doctor Posada diciéndoles que tendrían que pasar sobre su cadáver.

A Pedro Miret, Abelardo Crespo y Fidel Labrador les inyectaron aire y alcanfor en las venas para matarlos en el Hospital Militar. Deben sus vidas al capitán Tamayo, médico del Ejército y verdadero militar de honor, que a punta de pistola se los arrebató a los verdugos y los trasladó al Hospital Civil. Estos cinco jóvenes fueron los únicos heridos que pudieron sobrevivir.

Por las madrugadas eran sacados del campamento grupos de hombres y trasladados en automóviles a Siboney, La Maya, Songo y otros lugares, donde se les bajaba atados y amordazados, ya deformados por las torturas, para matarlos en parajes solitarios. Después los hacían constar como muertos en combate con el Ejército. Esto lo hicieron durante varios días y muy pocos prisioneros de los que iban siendo detenidos sobrevivieron. A muchos los obligaron antes a cavar su propia sepultura. Uno de los jóvenes, cuando realizaba aquella operación, se volvió y marcó en el rostro con la pica a uno de los asesinos. A otros, inclusive, los enterraron vivos con las manos atadas a la espalda. Muchos lugares solitarios sirven de cementerio a los valientes. Solamente en el campo de tiro del Ejército hay cinco enterrados. Algún día serán desenterrados y llevados en hombros del pueblo hasta el monumento que, junto a la tumba de Martí, la patria libre habrá de levantarles a los "Mártires del Centenario".

El último joven que asesinaron en la zona de Santiago de Cuba fue Marcos Martí. Lo habían detenido en una cueva en Siboney el jueves 30 por la mañana junto con el compañero Ciro Redondo. Cuando los llevaban caminando por la carretera con los brazos en alto, le dispararon al primero un tiro por la espalda y ya en el suelo lo remataron con varias descargas más. Al segundo lo condujeron hasta el campamento; cuando lo vio el comandante Pérez Chaumont exclamó: "¡Y a éste para qué me lo han traído!" El tribunal pudo escuchar la narración del hecho por boca de este joven que sobrevivió gracias a lo que Pérez Chaumont llamó "una estupidez de los soldados".

La consigna era general en toda la provincia. Diez días después del 26, un periódico de esta ciudad publicó la noticia de que, en la carretera de Manzanillo a Bayamo, habían aparecido dos jóvenes ahorcados. Más tarde se supo que eran los cadáveres de Hugo Camejo y Pedro Véliz. Allí también ocurrió algo extraordinario; las víctimas eran tres; los habían sacado del cuartel de Manzanillo a las 2:00 de la madrugada; en un punto de la carretera los bajaron y después de golpearlos hasta hacerles perder el sentido, los estrangularon con una soga. Pero cuando ya los habían dejado por muertos, uno de ellos, Andrés García, recobró el sentido, buscó refugio en casa de un campesino y gracias a ello también el tribunal pudo conocer con todo lujo de detalles el crimen. Este joven fue el único sobreviviente de todos los prisioneros que se hicieron en la zona de Bayamo.

(...) Creo haber justificado suficientemente mi punto de vista: son más razones que las que esgrimió el señor Fiscal para pedir que se me condene a veintiséis años de cárcel; todas asisten a los hombres que luchan por la libertad y la felicidad de un pueblo, ninguna a los que lo oprimen, envilecen y saquean despiadamente; por eso yo he tenido que exponer muchas y él no pudo exponer una sola. ¿Cómo justificar la presencia de Batista en el poder, al que llegó contra la voluntad del pueblo y violando por la traición y por la fuerza las leyes de la República? ¿Cómo calificar de legítimo un régimen de sangre, opresión e ignominia? ¿Cómo llamar revolucionario un gobierno donde se han conjugado los hombres, las ideas y los métodos más retrógados de la vida pública? ¿Cómo considerar jurídicamente válida la alta traición de un tribunal cuya misión era defender nuestra Constitución? ¿Con qué derechos envían a la cárcel a ciudadanos que vinieron a dar por el decoro de su Patria su sangre y su vida? ¡Eso es monstruoso ante los ojos de la nación y los principios de la verdadera justicia!

Pero hay una razón que nos asiste más poderosa que todas las demás: somos cubanos, y ser cubano implica un deber, no cumplirlo es crimen y traición. Vivimos orgullosos de la historia de nuestra Patria, la aprendimos en la escuela y hemos crecido oyendo hablar de libertad, de justicia y de derechos. Se nos enseñó a venerar desde temprano el ejemplo glorioso de nuestros héroes y de nuestros mártires. Céspedes, Agramonte, Maceo, Gómez y Martí fueron los primeros nombres que se grabaron en nuestro cerebro, se nos enseñó que el Titán había dicho que la libertad no se mendiga sino que se conquista con el filo del machete, se nos enseñó que para la educación de los ciudadanos en la patria libre, escribió el Apóstol en su libro La Edad de Oro: "Un hombre que se conforma con obedecer leyes injustas, y permite que le pisen el país en que nació los hombres que se lo maltratan, no es un hombre honrado... En el mundo ha de haber cierta cantidad de decoro como ha de haber cierta cantidad de luz. Cuando hay muchos hombres sin decoro, hay siempre otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres. Esos son los que se rebelan con fuerza terrible contra los que le roban a los pueblos su libertad, que es robarles a los hombres su decoro. En esos hombres van miles de hombres, va un pueblo entero, va la dignidad humana..." Se nos enseñó que el 10 de octubre y el 24 de febrero son efemérides gloriosas y de regocijo patrio porque marcan los días en que los cubanos se rebelaron contra el yugo de la infame tiranía, se nos enseñó a querer y defender la hermosa bandera de la estrella solitaria y a cantar todas las tardes un himno cuyos versos dicen que vivir en cadenas es vivir en afrenta y oprobio sumidos, y que morir por la Patria es vivir. Todo eso aprendimos y no lo olvidaremos aunque hoy en nuestra Patria se está asesinando y encarcelando a los hombres por practicar las ideas que les enseñaron desde la cuna. Nacimos en un país libre que nos legaron nuestros padres, y primero se hundirá la Isla en el mar antes que consintamos en ser esclavos de nadie.

Parecía que el Apóstol iba a morir en el año de su centenario, que su memoria se extinguiría para siempre, ¡tanta era la afrenta! Pero vive, no ha muerto, su pueblo es fiel a su recuerdo; hay cubanos que han caído defendiendo sus doctrinas, hay jóvenes que en magnífico desagravio vinieron a morir junto a su tumba, a darle su sangre y su vida para que él siga viviendo en el alma de la Patria. ¡Cuba, qué sería de ti si hubieras dejado morir a tu Apóstol! Termino mi defensa, pero no lo haré, como hacen siempre todos los letrados, pidiendo la libertad del defendido; no puedo pedirla cuando mis compañeros están sufriendo ya en Isla de Pinos ignominiosa prisión. Enviadme junto a ellos a compartir su suerte, es concebible que los hombres honrados estén muertos o presos en una República donde está de presidente un criminal y un ladrón.A los señores Magistrados, mi sincera gratitud por haberme permitido expresarme libremente, sin mezquinas coacciones; no os guardo rencor, reconozco que en ciertos aspectos habéis sido humanos y sé que el presidente de este Tribunal, hombre de limpia vida, no puede disimular su repugnancia por el estado de cosas reinantes que lo obliga a dictar un fallo injusto. Queda todavía a la Audiencia un problema más grave: ahí están las causas iniciadas por los setenta asesinatos, es decir, la mayor masacre que hemos conocido; los culpables siguen libres con un arma en la mano que es una amenaza perenne para la vida de los ciudadanos; si no cae sobre ellos todo el peso de la ley, por cobardía o porque se lo impiden y no renuncian en pleno todos los magistrados, me apiado de vuestras honras y compadezco la mancha sin precedentes que caerá sobre el Poder Judicial. En cuanto a mí, sé que la cárcel será dura como no lo ha sido nunca para nadie, preñada de amenazas, de ruin y cobarde ensañamiento, pero no la temo, como no temo la furia del tirano miserable que arrancó la vida a setenta hermanos míos. Condenadme, no importa, la historia me absolverá.

viernes, 15 de abril de 2011

II Cumbre mundial de Comunicación Política

La II Cumbre Mundial de Comunicación se inauguró este miércoles en Quito, Ecuador, con la participación de expertos de América Latina, Estados Unidos y Europa, quienes debatirán sobre estrategias de mercadeo político y campañas publicitarias.

La reunión, que se efectúa bajo el auspicio de la capital ecuatoriana y termina el dia de hoy viernes, los temas que se han analizado son: la opinión pública como herramienta para indagar las expectativas que genera un candidato político, la marca de un candidato, claves, lineamientos y tácticas para ganar votos.

Además, se abordan la importancia de las nuevas tecnologías en la comunicación política, la construcción estratégica de identidad digital, el posicionamiento de un candidato en la web, el surgimiento del ciberciudadano, y el diseño de campañas políticas en línea.

El primero de estos encuentros se realizó en 2010, en San Martín, Buenos Aires, y el próximo se efectuará en Miami, Estados Unidos.

Acto Oficial de Inauguración y la Conferencia Magistral: "Ciudades que comunican confianza frente a ciudades de marcas blandas"


Toni Puig Picart - España
"El Guru de las Ciudades" Arte, Cultura, ciudad y gobiernos bajo su innovadora mirada. Pecart es catalán y uno de los autores de programa cultural del gobierno de José Luis rodríguez y asesor del ayuntamiento de Barcelona.


lunes, 11 de abril de 2011

7 preguntas en busca de respuesta – Javier Maza

1. La gente esta harta de los partidos y políticos viejos?
Pareciera que sí porque en estas elecciones ganaron los 2 candidatos más jóvenes, Ollanta Humala y Keiko Fujimori, y perdieron los más viejos.

2. La gente esta harta del modelo económico?
Si bien la economía del Perú ha mejorado en los últimos 15 años hay un significativo sector de la sociedad que no ha visto en ello ningún beneficio. Más del 30 % de los votantes escogió a Humala. 15 regiones votaron por Humala. Fue el único candidato que logró porcentajes por encima del 50 % en algunos departamentos. Hay allí un claro mensaje de descontento social.

3. Hay un movimiento pendular hacia la izquierda en Perú?
En noviembre los limeños eligieron como alcaldesa a una candidata de izquierda, después que una candidata de derecha habia estado encabezando las preferencias. Ahora los votantes hicieron lo mismo con un candidato de izquierda… después que uno de derecha estuvo primero hasta hace 3 meses.

4. Los candidatos perdedores decidirán quién es el ganador en segunda?
No necesariamente. Parte de los votos de Toledo y Castañeda fueron a dar a Humala y Fujimori. Por qué habría que pensar ahora que los candidatos perdedores tendrán la capacidad de endosar el voto de sus simpatizantes hacia Humala o Fujimori?… mi impresión es que los electores volverán a elegir a quien mejor le parezca.

5. Quién tiene mayores posibilidades de ganar la segunda vuelta?
Cualquiera de los 2 puede ganar… o perder. Terminó la primera vuelta y se inicia una nueva elección. Una nueva campaña en donde probablemente será mas importante no cometer errores que tener grandes aciertos. Al momento de hacer este análisis creo que es Humala quien tiene mas posibilidades de ganar por lo contundente que ha sido su triunfo, especialmente en provincias y aún en Lima en donde ocupó un honroso segundo lugar después de PPK.

6. Quién fue el gran perdedor?
El Perú porque, gane Humala o Fujimori, hay y seguirá habiendo una gran incertidumbre que puede afectar el equilibrio de la economía, volatilizar el dólar y poner “on hold” inversiones importantes en tanto el panorama político no se aclare.

7. En qué momento se jodió el Perú?
El Perú se re-jodió en el momento que Toledo, PPK y Castañeda, sabiendo que ninguno tenía posibilidades claras de pasar a segunda vuelta, no negociaron una candidatura de unidad de centro.

viernes, 8 de abril de 2011

Película "RECUENTO"

FICHA TÉCNICA:
Título original: Recount
Genero: Drama
Director: Jay Roach
Guión: Danny Strong
Personajes: John Hurt, Tom Wilkinson, Kevin Spacey y Laura Dern
Productor: Kevin Spacey
Fotografía: Jim Denault
Música: Dave Grusin
Productora: HBO Films
Nacionalidad: USA
Año: 2008
Duración: 1h,51m
Web oficial: www.hbo.com
Trailer: www.youtube.com
Ubicación del films: La película fue filmada sobre todo adentro Jacksonville, La Florida. Muchas escenas fueron tiradas en el pasillo de ciudad, el palacio de justicia federal, o Torre de Riverplace. Otras escenas fueron tiradas en la localización en el Tribunal Supremo de la Florida y el exterior del Tribunal Supremo de los E.E.U.U.

SÍNTESIS:
Año 2000. Las elecciones presidenciales de los Estados Unidos tienen lugar en todos los estados del país. En un recuento de votos igualado entre Al Gore y George W. Bush, el estado de Florida se dispone a votar en unas elecciones no exentas de polémica.

En los escrutinios iniciales la balanza se inclina hacia Bush, y Al Gore sorprendido por el resultado, impugna el recuento. La denuncia del candidato por el partido demócrata dejará entrever una serie de irregularidades en el sistema de votación y la Corte Suprema de los Estados Unidos se verá obligada a dictar una sentencia que favorezca a uno de los dos candidatos a la presidencia.

La película ha sido dirigida por Jay Roach ("Los padres de él", la saga "Austin Powers") que ha contado con un elenco de actores de primera línea, como Kevin Spacey ("Medianoche en el jardín del bien y del mal", "Superman Returns (el regreso)"), los británicos John Hurt ("V de vendetta", "Los crímenes de Oxford") y Tom Wilkinson ("Michael Clayton", la serie "John Adams"); y Laura Dern ("Year of the Dog") que destaca en su papel de Catherine Harris, secretaria de Estado de Jeb Bush, hermano del propio George W. Bush, cuando fue gobernador de Florida.

La película, que produjo la prestigiosa cadena de televisión HBO, obtuvo 6 nominaciones en los Premios Emmy 2008.




miércoles, 6 de abril de 2011

Las 12 reglas para el éxito según Steve Jobs

Les comparto el decálogo de Steve Jobs, los 12 puntos que han llevado al éxito a uno de los más grandes empresarios de todos los tiempos, y que también te ayudaran a ti a convertirte en un gran hombre de negocios.

1. Haz lo que te gusta hacer. Encuentra tu verdadera pasión. La única manera de hacer un gran trabajo es hacer lo que te gusta.

2. Sé diferente. Piensa diferente.

3. Esfuerzate al máximo. Haz tu mejor esfuerzo en cualquier trabajo. No te duermas! El éxito genera más éxito. Así que mantente hambriento de éxito. Contrata a gente con pasión por la excelencia.

4. Haz un análisis FODA. Tan pronto como inicies/crees una empresa haz una lista escrita de fortalezas y debilidades de ti y tu empresa. No dudes en eliminar las manzanas podridas.

5. Sé emprendedor. Busca lo próximo que viene. Encuentra un grupo de ideas sobre las que hay que actuar rápida y decididamente y métete en eso. A veces el primer paso es el más difícil. Solo hazlo! Ten el coraje de seguir a tu corazón y tu intuición.

6. Comienza en pequeño, piensa en grande. No te preocupes de demasiadas cosas a la vez. Toma un puñado de cosas simples para comenzar, y entonces ve progresando hacia cosas más complejas. No pienses solo en el mañana, sino también en el futuro distante.

7. Aspira a ser líder. Posee y controla la tecnología primaria en todo lo que haces. Si hay una mejor tecnología disponible, úsala, no importa si no hay nadie más usándola. Sé el primero, y conviértelo en un estándar de la industria.

8. Enfócate en el resultado. La gente te juzga por el resultado, así que enfócate en el resultado. Sé un patrón de calidad. Algunas personas no están acostumbradas a un ambiente donde se espera la excelencia. Promociona. Si no saben de ti, no te van a comprar. Pon atención en el diseño. “El diseño no es solo como se ve o qué parece, es como funciona.”

9. Pide la opinión. Pide la opinión de personas con distintos trasfondos. Cada uno de ellos te dirá algo útil. Enfócate en aquellos que van a usar tu producto. Escucha a tus clientes.

10. Innova. La innovación distingue a un líder de los seguidores. Delega, deja que otros hagan el 50% del trabajo administrativo para poder pasar el 50% de tu tiempo en cosas nuevas. Concéntrate en las creaciones importantes y en la innovación radical. Contrata a personas que quieran hacer las mejores cosas del mundo. Necesitas una cultura orientada al producto, incluso en una empresa de tecnología.

11. Aprende del fracaso. Algunas veces, cuando innovas cometes errores. Es bueno admitirlos rápidamente y seguir mejorando tus otras innovaciones.

12. Aprende continuamente. Siempre hay “algo mas” para aprender! Haz polinización cruzada de ideas tanto dentro como fuera de la empresa. Aprende de clientes, competidores y socios. Y eres socio de alguien que no te gusta, aprende a quererlo, halágalo y aprende a beneficiarte de él. Aprende a criticar a tus enemigos abierta y honestamente.

Visto en: negociosyemprendimiento.org

lunes, 4 de abril de 2011

El Ala Oeste de la Casa Blanca


El ala oeste (The west wing) es una serie de televisión estadounidense muy popular, ambientada en el ala oeste de la Casa Blanca, donde se ubica el Despacho Oval y los despachos de los principales miembros del equipo del presidente, durante la ficticia administración demócrata de Josiah Bartlet (Martin Sheen).

Emitida por primera vez en la NBC en 1999, ha sido además transmitida por muchas otras cadenas en docenas de países. recibiendo criticas muy positiva de profesores de ciencias políticas, y antiguos empleados de la Casa Blanca convirtiendose asi en una de las series favoritas de politicos y de aquellos que esten interesados en la política, es una serie de culto como lo señala el asesor de comunicación publica Yuri Morejon.


Javier Vizcaíno entrevista a Yuri Morejón sobre la serie El Ala Oeste de la Casa Blanca


Esta serie ha ganado tres Globos de Oro y 26 Premios Emmy, empatando con Hill Street Blues como la mayor ganadora de la historia de los premios Emmy.

La serie terminó su séptimo año de emisión el 14 de mayo del 2006.

Técnicas de comunicación política

Documento de trabajo del Partido Popular desarrollado por Antonio Sola Reche, con la colaboración de Belén García Jiménez Directora Técnica de Fornación.

Contenido

Módulo 1. Comunicación Política. Conceptos básicos
- ¿Qué entendemos por comunicación?
- Proceso
- Principios y barreras de la comunicación
- Habilidades de comunicación

Módulo 2. Comunicación oral 20
- El mensaje
- El estilo
- El vocabulario
- La memoria
- La voz
- El cuerpo. Gesto y significado.
- El cuerpo a cuerpo
- Reuniones de grupo
- El mitin

Módulo 3. Comunicación mediática
- ¿Qué es un periodista? Y ¿qué es noticia?
- Tipos de medios
- Instrumentos de trabajo con los medios de comunicación
- Técnicas de Comunicación Política

Módulo 4. Comunicación audiovisual
- Características de los medios audiovisuales
- Técnicas de expresión más adecuadas
- Otras estrategias verbales
- Imagen gestual en televisión
- Indumentaria en televisión
- La figura del portavoz
- Consejos para enfrentarse a los medios audiovisuales
- La entrevista: en prensa escrita, en radio, en televisión, el entrevistador
- Puesta en escena en televisión
- El debate televisado y la tertulia
Tecnicas Comunicación Política

10 Consejos prácticos para tratar con los medios de comunicación

Por Suso López

CONDENADOS A ENTENDERSE.

En las campañas electorales, la relación entre políticos y periodistas está salpicada de tiras y aflojas constantes, veamos la claves de esta reación.

Políticos y periodistas se necesitan mutuamente. Los primeros son conscientes de que los medios erigen como el principal canal de comunicación para hacer llegar su mensaje al electorado y como trampolín de cara a la configuración de la agenda pública en base a aquellos temas que les interesan.

Los segundos, ven e los políticos como una fuente de información importante y fecunda y ejercen una tarea de control del poder político y de aquellas personas que lo detentan.

En campaña electoral o fuera de ella, en el gobierno o en la oposición, la relación entre políticos y periodistas está salpicada de tiras y aflojas constantes. Y es que hacen falta una serie de claves para sobrevivir a la fuerza de los medios. Estas son algunas de ellas.

1) NO SUBESTIMAR NI MENOSPRECIAR A LOS MEDIOS DE COMUNICACION

El respeto, la seriedad y profesionalidad son los principales ejes para una relación fluida y exitosa

2) HONESTIDAD

Ni periodistas ni ciudadanía perdonan una mentira. Cuando se comente un error es mejor reconocerlo que ocultarlo

3) ESTRATEGIA

También en comunicación, hay que marcar unos objetivos y los pasos para alcanzarlos. Nada puede dejarse al azar.

4) EL DISCURSO

Hay que dar forma a un relato seductor y a la vez claro y conciso. La elección de una serie de “ideas fuerza” (mejor 2 buenas que 4 regulares) permitirán situar el mensaje elegido en los titulares

5) CONOCER EL FUNCIONAMIENTO DE LOS MEDIOS

Se deben conocer sus rutinas, el público al que se dirigen el lenguaje y el estilo que emplean, así como sus estructuras internas

6) LAS RUEDAS DE PRENSA

Deben planificarse pensando en los medios, Detalles como la hora de convocatoria, la iluminación, el sonido y La colocación de los medios gráficos deben tenerse en cuenta

7) MATERIAL COMPLEMENTATRIO

Los medios de comunicación trabajan siempre a contra reloj por lo que agradecen que se les facilite su labor. Un DVD con fotografías, con clips de video o audio, así como con información complementaria siempre es bienvenido

8 ) EL CONTACTO CON LOS MEDIOS DEBE MANTENERSE VIVO

Una llamada para ampliar o aclarar información ayuda a afianzar las relaciones.

9) NO RECURRIR AL SILENCIO

Una rueda de prensa sin preguntas o la negativa a realizar una comparecencia se interpreta como un desprecio a la ciudadanía. Quien se dedica a la política tiene que saber que está obligado a dar explicaciones de sus actuaciones.

10) NO BAJAR LA GUARDIA

El político lo es día y noche, el periodista también. Un comentario fuera de lugar puede lastrar una carrera, así que conviene cuidar lo que se dice, cómo se dice y cuándo se dice.

Estos sólo son 10 mandamientos para mantener una buena relación con los medios, podrían ser muchos más. Ayudan al político y a su equipo, pero no sirven de nada si detrás de si no hay un proyecto político sólido y de y de garantías que conecte, además de con la prensa, con la ciudadanía.

Fuente: Más Poder Local Magazine

viernes, 1 de abril de 2011

Think Politics with Google

El pasado 29 de Marzo se desarrollo en la Republica Argentina el envento ThinkPolitics with Google orientado a reflexionar sobre el rol de Internet y las herramientas Web 2.0 en las campañas políticas.

A inicios de un año electoral en ese pais, Google invitó a todos los involucrados en la comunicación política y planificación de estrategias de campaña a compartir un encuentro donde acercamos las últimas tendencias en acciones on-line y conversar sobre su eficacia en los resultados electorales.

Reconocidos expertos presentaron casos de éxito a nivel mundial, nuevas tendencias, consejos prácticos para desarrollar estrategias exitosas y debatieron sobre el rol de Internet en la formación de opinión pública.


Presentaciones:



Presenta: Victor Valle, Director de Ventas Online para América Latina de Habla Hispana, Google Inc.

Presenta: Mía Cambronero, Global Campaigner y Social Media Manager, Avaaz.org.

Presenta: Hernán Nadal, especialista en movilizaciones públicas y recaudación de fondos a través de nuevos medios.